Soy de las personas que prefiere hacer el amor a matar gente por placer.
Prefiero escuchar a la gente y dar mi punto de vista a callarlos con una pistola.
A veces prefiero reírme de la gente en su cara a estar hablando a sus espaldas.
¿Para qué tanto odio? Somos iguales, somos humanos.
Eso sí, cada quien vive a su manera. Respetando sus ideologías, religiones, filosofías, cultura.
¿Para qué opinar sobre lo que no sabes? Es más sabio quedarse callado.
Por eso, ante todo, prefiero vivir y dejar vivir. Y que hagas lo mismo es lo único que recomiendo.
1 comentario:
no podría estar más de acuerdo, por desgracia vivimos en una cultura donde la norma al parecer es apedrear al primero que no tenga un punto de vista igual al propio, y donde el odio es ya un estilo de vida... hace tanta falta saber escuchar, saber entender que cada quien puede tener un punto de vista diferente y no por eso menos válido que cualquier otro... eeeeen fin
Publicar un comentario